Reseña: Memorias de un hombre en pijama, de Paco Roca

Paco Roca | Astiberri | 140 págs | Cartoné | 2011



Paco Roca aborda la vida cotidiana de un cuarentón que por fin ha conseguido su sueño infantil: quedarse en casa todo el día con el pijama puesto. Con una considerable carga autobiográfica y un referente en la serie televisiva Seinfeld, el autor valenciano apela más a la sonrisa que a la carcajada.
Estas Memorias de un hombre en pijama, donde en ocasiones también tienen cabida reflexiones de corte más serio y que han sido prepublicadas semanalmente durante año y medio –de marzo de 2010 a julio de 2011– en el periódico valenciano Las Provincias, describen en todo caso a Paco Roca como un atento observador de comportamientos propios y ajenos.

Memorias de un hombre en pijama inaugura la trilogía de ''Un hombre en pijama''. El proyecto comenzó en forma de tiras para el diario Las provincias, por lo que este libro es un recopilatorio de todas las publicaciones en dicho diario. En este primer volumen, Paco Roca agrupa las viñetas en forma de rectángulo y distribuyendo 6 en cada página. El que el tamaño de la viñeta no varíe le da dinamismo a la historia pero a la vez la narración es homogénea, el ritmo se mantiene porque la historia es como una sitcom. 

Que Paco Roca tiene un talento inmenso para tratar temas de la vida cotidiana no es una novedad. En este cómic nos habla de múltiples temas en los que nos veremos identificados. Nadie como él sabe hacer un cómic que hable de cosas tan normales y que resulte ameno y divertido. Y lo que es mejor, el propio autor sabe reírse de él mismo. Muy pocos tienen esa capacidad. Ahora bien, si tengo que poner alguna pega sería algún que otro personaje y sus comentarios un tanto machistas (no sé si la intención era plasmar y denunciar el machismo o simplemente hablar de ciertas situaciones que se dan entre amigos. Espero que no). En una de las viñetas dice Paco que quién querría ver un documental sobre su vida, que no es interesante. Pues a mi me parece más que interesante y lo lleva demostrando en muchos de sus trabajos. A rasgos generales, creo que me hizo reír más Andanzas de un hombre en pijama que este primer volumen.


En cuanto al apartado gráfico, el autor se mantiene en su tónica de usar los colores para potenciar las emociones y la línea clara. En esta trilogía el autor define poco los fondos para darle un tono más desenfadado a las historietas. Porque justamente eso es lo que importa: el personaje y sus más que logradas expresiones (creo que es lo que más me hace reír: sus reacciones), el bocadillo y las historietas. El dibujo de Paco sigue siendo uno de mis favoritos. Me encanta los colores que usa en sus cómics, hacen que me meta en la historia y que la viva. 

Creo que me queda poco por comentar. En resumen, es una obra con mucho humor, autocrítica de uno mismo y buen dibujo. Si os gustan las sitcom, os gustará este cómic.

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